Iglesia de San Miguel
Se inició en el siglo XIV, sobre los restos de otra anterior de estilo románico. La obra continuó a lo largo de los siglos XVI y XVII. Las obras se documentan desde 1547, y desde esa fecha aparece al frente de la construcción Juan de Arce, junto a él Fernando del Río, Fernando de la Puente, Fernando del Hoyo, siendo el primero, el director de la obra. El interior del templo, es de tres naves separadas por pilares compuestos. De éstos arrancan arcos apuntado.
Las cubiertas están formadas por bóvedas de crucería. La cabecera del templo posee un presbiterio y dos capillas, que están separadas del resto del templo por amplias rejas de forja. A los pies se levanta al torre, con restos del antiguo templo románico. El acceso a la iglesia es por la portada del lado del Evangelio, llamada del Sol, o por la portada de la torre.En el interior del recinto sacro se conservan bellos retablos de diferentes épocas como un retablo neoclásico del siglo XVIII, un retablo con una enorme pintura de Animas del siglo XVIII. En la capilla de Santiago, hay un retablo barroco de 1634, donde aparece el emblema del donante, don Diego García de Tera, Arzobispo de México, presente también en uno de los dos lucillos sepulcrales de la capilla. En el retablo hay tres tablas pintadas por Vicente Carducho, con los temas de la Adoración de los Reyes Magos, la Adoración de los Pastores y la Coronación de la Virgen. La capilla la cierra una reja de hierro del primer cuarto del siglo XVII. El retablo mayor fue realizado por el ensamblador Santiago Carnicero en 1692 y dorado en el año 1697 por Lucas de la Concha. En él están las esculturas de San Pedro, San Pedro, San Pablo y San Miguel. El tabernáculo del mismo acoge una talla de la Virgen de la Piedad del último tercio del siglo XV. En la nave de la Epístola se halla la capilla de don Diego González Quintero cerrada con una reja realizada en 1586 por el orfebre Juan de Vitoria. Destaca el retablo renacentista de mediados del siglo XVI, con los relieves de San Juan Bautista, San Andrés, Santiago Matamoros y la Asunción y pinturas de Juan de Villoldo.
Entre el resto de obras que atesora el templo, se encuentra una sillería de coro en madera de nogal, del año 1606, hecha por el ensamblador palentino Juan Rey. Se compone de 17 asientos con paños decorados con motivos geométricos. En el centro se ha situado un facistol de la misma época con unos misales y cantorales de los siglos XVI y XVII. Del órgano barroco sólo se conserva la caja realizada en 1728 y dorada en 1738. En este templo de San Miguel, las piezas de mayor valor y las que no están al culto se han expuesto en un pequeño museo, donde destacan por su valor XVI y XVII. Podemos encontrar cálices con punzones de Avila, la custodia procesional de Gaspar Pinto, la Cruz con el punzón de Beui, bandejas, crismones, cajas portaviáticos y navetas.
Arco de la Plaza Mayor
Son varias las obras de arte que el paso del tiempo ha ido acumulando en la villa de Piña de Campos, como el Arco de la Plaza, el cual era la antigua puerta de la muralla, obra del siglo XVI; junto a él actualmente se levanta el ayuntamiento. El arco, aparece rematado por un sobrecuerpo de ladrillo con el reloj municipal y sobre él una campana.
Casa Grande y Portal de Belén
Entre los edificios civiles, destaca la Casa Grande, llamada así por sus enormes dimensiones, ya que posee una fachada de 50 m., otra de 40 m. Y la principal de 25 m., donde aparece el escudo de la Orden de Calatrava. Posee en el interior un interesante patio, con un atrio formado por columnas de piedra en circunferencia de cinco metros de altura, que comunica con el piso superior a través de una escalinata de piedra.